El barco más antiguo, el imperio más grande, los soldados con más cojones
En la columna de Ad Absurdum en el número 27 de la revista reflexionan sobre la necesidad de adornar y glorificar la historia.
En la columna de Ad Absurdum en el número 27 de la revista reflexionan sobre la necesidad de adornar y glorificar la historia.
Como en tantos otros casos, aunque el momento de medidas de choque es durante la tormenta, si algo nos enseña la historia es que solo podremos conocer las dimensiones de lo acontecido una vez amaine el temporal.
El historiador Enrique Moradiellos reflexiona en esta tribuna acerca del papel de las Humanidades en nuestros días. ¿Cuáles son las necesidades que exigen el estudio de las disciplinas que se engloban bajo la denominación de humanidades? Respuestas contundentes a los interrogantes que plantea la conocida como «crisis de las humanidades».
Si no enseñamos a los ciudadanos del futuro a participar del apasionante proceso de la duda y la averiguación, quizá ellos y nosotros muramos fagocitados por la certeza y la productividad.
La anábasis de Ad Absurdum de este número reflexiona sobre algunas paradojas que se dan entre la conservación del patrimonio natural y el histórico.
Nos preocupamos constantemente por conocer los hechos, procesos y estructuras históricos. Si algo inquieta a los historiadores es el dato, el acontecimiento, lo objetivo. Pero, ¿qué ocurre con los sujetos de la historia? ¿Cómo se construyen? ¿Quiénes son? ¿Qué consecuencia tiene apelar a determinados colectivos como actores de un pasado común?
Este año 2014, como sabemos, es el del recuerdo de la Primera Guerra Mundial, ya que se conmemoran los primeros cien años de su comienzo. La divulgación, por su parte, está haciendo un trabajo excelente, como ya vimos con el documental interactivo sobre la Gran Guerra, pero también los homenajes están siendo peculiares. En el … Leer más