Una cicatriz de celuloide

Apocalypse Now es probablemente el mejor ejemplo de cómo la guerra puede transformar, degradar y alterar la naturaleza del ser humano. Hay en la pulsión de sus planos, en los recorridos de la cámara y en las resonancias literarias un indescifrable valor estético y reflexivo sobre el absurdo de la propia lucha.

En general, el arte ha encontrado en la guerra un doble potencial. Por un lado, es un excitante marco narrativo, pues genera un espacio donde las pasiones humanas se desatan, posibilitando excesos de todo tipo. Por el otro, es la causante de muchos de los traumas que se destilan o reflejan, en mayor o menor medida, a través de la creación. El cine, lejos de estar apartado de dicho influjo, se ha bañado constantemente en tales aguas.

Artículo añadido al carrito.
0 artículos - 0,00