Desde que comenzó la aventura de Descubrir la Historia, decidimos que debía acompañarnos un mapa. ¿No son los mapas los perfectos compañeros de viaje de los historiadores? Ya en los primeros días de vida, en nuestras redes sociales utilizamos el mapa que está sobre estas líneas como cabecera. Se trata del mapa del orbe de la Tierra elaborado por Abraham Ortelius en 1570. Se publicó, junto con otros 69 mapas, en una obra que llevaba como título Theatrum Orbis Terrarum, y que se puede considerar el primer atlas moderno de la historia.
Ortelius fue uno de los impulsores de la cartografía, en un periodo histórico en el que la exploración del mundo se encontraba en plena ebullición.
En su atlas compiló mapas de todos los lugares del mundo conocido —la mayoría, elaborados por otros autores— y eso le permitió alcanzar una posición que, dado el contexto histórico, debió ser uno de los trabajos soñados por cualquier cartógrafo: geógrafo de Felipe II. Su obra continuó actualizándose hasta principios del siglo XVII.
Para nosotros, es un mapa especial porque nos acompaña desde hace varios años. Y, ahora, que comenzamos una nueva etapa, con distribución en una escala mayor, queríamos cerrar este número con un breve reconocimiento a Ortelius y sus mapas, que son auténticos regalos para la vista.